Diseño de Autor Desde el Corazón del Chaco
El camino de un creador chaqueño que conquistó la moda con autenticidad
En el corazón de Sáenz Peña, localidad en el interior de la provincia del Chaco, un niño de solo cuatro años ya soñaba con mundos de colores, telas y formas. Ese niño era Victor Joaquín, quien años más tarde se convertiría en uno de los diseñadores de autor más destacados de su generación. “¿Recuerdas cuándo fue la primera vez que sentiste esa chispa por la moda?”, le pregunto, y su respuesta llega rápida, con una sonrisa: "Siempre lo supe, desde que veía las revistas de mi mamá. No entendía mucho, pero me fascinaba todo lo que veía".
Hoy, con una marca propia, Victor sigue siendo fiel a sus raíces. Su taller está lleno de bocetos, telas que selecciona con esmero y prendas que hablan de historias que solo él puede contar. ¿Qué es lo que más le inspira? “El Chaco, su cultura, la gente. Cada pieza que hago tiene algo de mis orígenes, algo de esa mezcla de lo urbano con lo rural, de lo simple con lo profundo”. La moda masiva no es su camino; su arte está en lo único, lo irrepetible. “Mi proceso creativo es único, pero no puedo hacer las cosas de otra manera. Cada prenda que diseño lleva parte de mí, y no hay dos iguales”, confiesa.
Victor Joaquín no solo diseña ropa, sino que cuenta historias. Cada una de sus colecciones refleja algo de su vida, de su cultura y de su manera de ver el mundo. ¿Y qué piensa sobre la moda masiva? “Tiene su lugar”, admite. “Pero yo prefiero crear algo que haga sentir especial a quien lo lleva. No me interesa producir en serie; prefiero dedicar tiempo a cada detalle”. Sus palabras resuenan mientras observo una chaqueta que acaba de terminar. El tejido parece contar su propio relato, y los colores evocan el paisaje chaqueño.
El éxito no ha cambiado su esencia. A pesar de su reconocimiento, Victor sigue siendo el chico de Sáenz Peña que soñaba con crear, con innovar. “Lo más importante para mí es que quien use mis diseños se sienta conectado con ellos, como si estuvieran hechos solo para esa persona”, afirma. Y, al verlo trabajar, es imposible no sentir que cada prenda que sale de sus manos lleva consigo un pedacito de su alma.
Creado por - Juan Ignacio Olysinsky
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